Los más utilizados son los de aluminio y plástico, los angulares proporcionan resistencia mecánica a las aristas expuestas del sistema, los de sección en U facilitan la puesta en obra y las entregas con otros elementos de la fachada.
Existen variantes con goterón para controlar la escorrentía del agua de lluvia y algunos incorporan también una malla para facilitar el solape con la adyacente.