Características intrínsecas del producto: adherencia, impermeabilidad, permeabilidad al vapor de agua, y durabilidad.
AdherenciaEl mortero monocapa precisa de la adherencia al soporte en dos fases distintas: en una primera, precisa de una adherencia rápida desde el momento de la aplicación sobre el soporte hasta la finalización del fraguado; en una segunda fase, la adherencia definitiva o de servicio. La adherencia del mortero tiene una relación directa con la rugosidad, la porosidad del soporte, y la capacidad de retención de agua que presente respecto al soporte en las condiciones ambientales existentes durante el tiempo de fraguado. Los morteros ya vienen preparados para obtener las condiciones correctas, pero no hay que olvidar que las condiciones de la pared de soporte las debe garantizar el proyectista en la elección de los materiales y los operarios que ejecutan el mortero monocapa humedeciendo su superficie en caso necesario.
ImpermeabilidadEsta característica hay que interpretarla correctamente porque afecta a una de las condiciones de durabilidad. El mortero monocapa no constituye una capa impermeable, pero tiene un modo de actuar que favorece la impermeabilidad: tiene la capacidad de absorber una determinada cantidad de agua durante un episodio de lluvia – que no llega a mojar el soporte- y después evaporarla cuando ha cesado. Se trata por tanto de un proceso cíclico que no presenta problemas si la masa de mortero está bien cohesionada y sin fisuras, y se respetan los espesores mínimos de mortero recomendados. Habría que añadir la peligrosidad de las heladas, si ocurren mientras el mortero está húmedo por efectos de la lluvia. Esta característica nos ayuda a comprender la razón por la que se desaconseja la colocación de monocapa en zonas permanentemente húmedas o sumergidas. Al no establecerse el ciclo humectación-evaporación, la humedad no es detenida, penetrando hacia el interior y degradando el mortero. Los fabricantes emplean determinadas formulaciones en la producción de los morteros que controlan factores que, entre otros, se interrelacionan para obtener un buen comportamiento impermeable: una capacidad de retracción baja, un módulo elástico bajo y buena resistencia a tracción.
Permeabilidad al vapor de aguaPosibilita que el vapor de agua del interior del edificio fluya hacia el exterior. Si este flujo no fuera posible, se crearían humedades por condensación. En general los morteros del mercado tienen unos valores correctos de permeabilidad que constan en sus fichas técnicas. El comportamiento higrotérmico de una fachada esta suficientemente estudiado y los proyectistas disponen de métodos de cálculo y aplicaciones informáticas que permiten su verificación.
DurabilidadEl modo en que responde un revestimiento monocapa al paso del tiempo, es su durabilidad. No es posible medirla y en el fondo es el resultado de la combinación de todos los factores expuestos hasta este momento: las decisiones de proyecto, la correcta elaboración y colocación, así como las características propias del producto suministrado. De todo ello va a depender que el revestimiento mantenga su correcto estado y aspecto durante un periodo de años.