El espesor del monocapa, una vez aplicado y realizado el tratamiento de acabado sobre el soporte debe respetar los siguientes espesores:
- Espesor general: 15 mm.
- Espesor recomendable bajo junquillos: 10 mm.
- Espesor mínimo admisible: 8 mm (aceptable sólo localmente o bajo junquillos).
- Espesor máximo admisible: 23 mm (aceptable sólo localmente por defectos de planeidad).
En fachadas sobrexpuestas a la lluvia o en orientaciones de poco o nulo asoleo, se tenderá a no bajar de los 12-15 mm de espesor.
Hay que centrar la atención sobre el hecho que muchos de los acabados consisten en formas distintas de erosión del acabado superficial, por lo que hay que calcular que durante la ejecución del acabado se pueden perder entre 1 y 3 mm del grosor de revestimiento. En los acabados que consisten en aplastados o planchados, aunque no se pierde material, sí que se puede reducir muy ligeramente el grosor con valores parecidos a los citados, sin embargo, estos acabados están desaconsejados por los inconvenientes comentados en el apartado 3.1.5. Únicamente en los acabados de piedra proyectada, el grosor resultará invariable o con ligera tendencia al incremento si no se realiza un planchado muy intenso. Aún así el mínimo espesor bajo árido será de 8 mm.
(3) Puede oscilar entre los 10 y los 20 mm en función del tipo de producto, del tipo de acabado, del soporte, etc. Los valores dados por el fabricante se encuentran en las especificaciones del producto.