¿Qué es el soporte?
Es el material sobre el que se aplica el mortero monocapa. Debe ser el adecuado para que la adherencia y durabilidad del revestimiento final sean las correctas, por lo que es imprescindible la existencia de una buena compatibilidad entre ambos.
En líneas generales, el soporte debe ser compatible químicamente, tener una resistencia mecánica y una cohesión suficientes, un grado de humedad adecuado y una superficie suficientemente rugosa y limpia de polvo, grasa, lechadas superficiales, desencofrantes, aceites...
Es preciso realizar una evaluación de su estado antes de iniciar la ejecución del revestimiento monocapa, a fin de prevenir posteriores patologías: fisuras de adherencia, desprendimientos,....
SOPORTES HABITUALES EN OBRA
Los más usuales son:
• Hormigón:
Puede ser hormigón in situ o bien prefabricado. El tipo de encofrado que se emplea para el hormigón in situ es determinante para la adherencia del futuro revestimiento monocapa. Así, el encofrado liso origina una superficie lisa en el hormigón que es necesario adecuar mediante la aplicación de un puente de unión (imprimación de adherencia), o mediante erosión mecánica (cepillo de púas metálicas, chorreo de arena,..).
El encofrado rugoso proporciona en cambio una superficie rugosa generalmente apta para la colocación posterior de un mortero monocapa. En el caso del hormigón prefabricado son aplicables estos mismos comentarios realizados para el hormigón in situ.
• Fábrica de ladrillo cerámico:
Se trata de un buen soporte y todos los formatos son adecuados para la aplicación de un revestimiento monocapa. La excepción la constituyen aquellos ladrillos con cara vidriada o vitrificada o tratados con algún producto hidrofugante. En estos casos es necesario crear rugosidad superficial mediante la aplicación de un puente de unión o mediante erosión mecánica.
• Bloque de hormigón:
El no hidrofugado es un soporte apto para la posterior aplicación de mortero monocapa., pero el hidrofugado debe ser tratado previamente con una imprimación de adherencia o mediante erosión mecánica.
Si se trata de un bloque de hormigón ligero, dada su mayor absorción y porosidad, será necesario aplicar un puente de unión, con un monocapa de bajo módulo de elasticidad.
• Revoco a base de mortero de cemento:
La superficie del mismo debe ser resistente y no pulvurulenta. Las superficies pulvurulentas se pueden endurecer y cohesionar con una imprimación consolidante.
• Bloque de termoarcilla (arcilla aligerada):
Es un material muy absorbente, por lo que además de humedecer su superficie, es conveniente aplicar una capa previa del mismo mortero monocapa para atenuar y uniformizar dicha absorción. No deberá presentar juntas mal ejecutadas ni piezas cortadas mal colocadas que se convierten en discontinuidades del soporte.
En todos los casos los soportes deben ser estable, y haber finalizado su proceso de endurecimiento y asentamiento antes de la aplicación de un mortero monocapa.
SOPORTES INCOMPATIBLES
No es posible la aplicación de morteros monocapa sobre soportes con escasa o nula porosidad, como pueden ser las superficies de tipo metálico, vidriado, pvc, pinturas...
El módulo de elasticidad del soporte debe ser igual o superior al del mortero monocapa, de lo contrario podrían La planeidad y el aplomado son claves para la preparación del soporte a revestir con mortero monocapa producirse desajustes en el mecanismo de deformación conjunto del sistema constituido por revestimiento y soporte. Por ejemplo, una pared divisoria de madera no es apta para colocar un mortero monocapa.
Este desacuerdo de deformaciones también puede ser motivado por diferencias importantes en los coeficientes de dilatación de revestimiento y soporte.
Tampoco es posible la aplicación de morteros monocapa sobre soportes de yeso (guarnecidos, prefabricados de yeso), por la incompatibilidad química existente entre el yeso y el cemento.
PLANEIDAD Y APLOMADO
Estas dos características deben encontrarse dentro de unos márgenes que permitan asegurar que el soporte es suficientemente plano, lo que facilitará la colocación del mortero monocapa con unos espesores dentro de los límites recomendables.
Si la planeidad y el aplomado no fuesen las adecuadas, se debe recurrir a operaciones como son:
- Relleno de oquedades
- Picado de las juntas salientes (rebabas de mortero).
- Recrecidos para defectos de planeidad superiores a 10 mm (medidos con la regla de 2m). Es posible realizarlos con el mismo mortero monocapa hasta espesores de 10mm. Para espesores de recrecido superiores, debe emplearse un mortero indicado para obras de albañilería en general.
- Si el espesor de la capa de recrecido es superior a 23 mm, debe reforzarse con malla de fibra de vidrio.
- Para espesores superiores a 5 cm, conviene realizar obra de albañilería compatible con el soporte.
La aplicación del mortero monocapa sobre el soporte se podrá efectuar transcurridas 24 horas después de la ejecución de esta capa de regularización o recrecido.